domingo, 28 de marzo de 2010


Lc 23, 1-49

Y levantándose todos ellos, le llevaron ante Pilato.
Comenzaron a acusarle diciendo: "Hemos encontrado a éste alborotando a nuestro pueblo, prohibiendo pagar tributos al César y diciendo que él es Cristo Rey."
Pilato le preguntó: "¿Eres tú el Rey de los judíos?" El le respondió: "Sí, tú lo dices."
Pilato dijo a los sumos sacerdotes y a la gente: "Ningún delito encuentro en este hombre."
Pero ellos insistían diciendo: "Solivianta al pueblo, enseñando por toda Judea, desde Galilea, donde comenzó, hasta aquí."
Al oír esto, Pilato preguntó si aquel hombre era galileo.
Y, al saber que era de la jurisdicción de Herodes, le remitió a Herodes, que por aquellos días estaba también en Jerusalén.
Cuando Herodes vio a Jesús se alegró mucho, pues hacía largo tiempo que deseaba verle, por las cosas que oía de él, y esperaba presenciar alguna señal que él hiciera.
Le preguntó con mucha palabrería, pero él no respondió nada.
Estaban allí los sumos sacerdotes y los escribas acusándole con insistencia.
Pero Herodes, con su guardia, después de despreciarle y burlarse de él, le puso un espléndido vestido y le remitió a Pilato.
Aquel día Herodes y Pilato se hicieron amigos, pues antes estaban enemistados.
Pilato convocó a los sumos sacerdotes, a los magistrados y al pueblo
y les dijo: "Me habéis traído a este hombre como alborotador del pueblo, pero yo le he interrogado delante de vosotros y no he hallado en este hombre ninguno de los delitos de que le acusáis.
Ni tampoco Herodes, porque nos lo ha remitido. Nada ha hecho, pues, que merezca la muerte.
Así que le castigaré y le soltaré."
Toda la muchedumbre se puso a gritar a una: "¡Fuera ése, suéltanos a Barrabás!"
Este había sido encarcelado por un motín que hubo en la ciudad y por asesinato.
Pilato les habló de nuevo, intentando librar a Jesús,
pero ellos seguían gritando: "¡Crucifícale, crucifícale!"
Por tercera vez les dijo: "Pero ¿qué mal ha hecho éste? No encuentro en él ningún delito que merezca la muerte; así que le castigaré y le soltaré."
Pero ellos insistían pidiendo a grandes voces que fuera crucificado y sus gritos eran cada vez más fuertes.
Pilato sentenció que se cumpliera su demanda.
Soltó, pues, al que habían pedido, el que estaba en la cárcel por motín y asesinato, y a Jesús se lo entregó a su voluntad.
Cuando le llevaban, echaron mano de un cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le cargaron la cruz para que la llevará detrás de Jesús.
Le seguía una gran multitud del pueblo y mujeres que se dolían y se lamentaban por él.
Jesús, volviéndose a ellas, dijo: "Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos.
Porque llegarán días en que se dirá: ¡Dichosas las estériles, las entrañas que no engendraron y los pechos que no criaron!
Entonces se pondrán a decir a los montes: ¡Caed sobre nosotros! Y a las colinas: ¡Cubridnos!
Porque si en el leño verde hacen esto, en el seco ¿qué se hará?"
Llevaban además otros dos malhechores para ejecutarlos con él.
Llegados al lugar llamado Calvario, le crucificaron allí a él y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda.
Jesús decía: "Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen." Se repartieron sus vestidos, echando a suertes.
Estaba el pueblo mirando; los magistrados hacían muecas diciendo: "A otros salvó; que se salve a sí mismo si él es el Cristo de Dios, el Elegido."
También los soldados se burlaban de él y, acercándose, le ofrecían vinagre
y le decían: "Si tú eres el Rey de los judíos, ¡sálvate!"
Había encima de él una inscripción: "Este es el Rey de los judíos."
Uno de los malhechores colgados le insultaba: "¿No eres tú el Cristo? Pues ¡sálvate a ti y a nosotros!"
Pero el otro le respondió diciendo: "¿Es que no temes a Dios, tú que sufres la misma condena?
Y nosotros con razón, porque nos lo hemos merecido con nuestros hechos; en cambio, éste nada malo ha hecho."
Y decía: "Jesús, acuérdate de mí cuando vengas con tu Reino."
Jesús le dijo: "Yo te aseguro: hoy estarás conmigo en el Paraíso."
Era ya cerca de la hora sexta cuando, al eclipsarse el sol, hubo oscuridad sobre toda la tierra hasta la hora nona.
El velo del Santuario se rasgó por medio
y Jesús, dando un fuerte grito, dijo: "Padre, en tus manos pongo mi espíritu" y, dicho esto, expiró.
Al ver el centurión lo sucedido, glorificaba a Dios diciendo: "Ciertamente este hombre era justo."
Y todas las gentes que habían acudido a aquel espectáculo, al ver lo que pasaba, se volvieron golpeándose el pecho.
Estaban a distancia, viendo estas cosas, todos sus conocidos y las mujeres que le habían seguido desde Galilea.

METANOIA: Evangelio del domingo de Ramos 2010

METANOIA: Evangelio del domingo de Ramos 2010

TIEMPO DE CUARESMA, TIEMPO DE CONVERSIÒN...


Pasión, es una palabra que hoy parece solo estar vinculada con el deporte. Vemos por doquier entusiastas apasionados que abarrotan los estadios, y que por ver un partido, son capaces de pasar una noche entera sin dormir o en condiciones climatológicas extremas para conseguir un boleto, y de armar una verdadera batalla campal cuando el equipo que se apoya pierde en buena lid en el campo. Sin embargo nada de eso construye… estos apasionados solo crean, en general, problemas, y no son instrumentos para cambiar nuestro orden social. Yo me pregunto ¿que pasaría si todos y cada uno de nosotros los católicos fuéramos verdaderos apasionados de nuestra fe… que esa misma pasión la sintiéramos por Jesucristo y su evangelio? Todo esto me recuerda la escena en la que Jesús al entrara al templo, al ver que se había convertido en una verdadero mercado, tomo un látigo y saco a golpes a toda la gente que estaba ahí. San Juan nos reporta en su evangelio que esto ocurrió porque “el celo por la casa del padre” lo consumía”. Todos nosotros deberíamos sentir esa misma pasión y lanzarnos a predicar el evangelio y a no permitir que el nombre de nuestro Señor sea tomado en vano. Si esto hiciéramos nuestras comunidades serían verdaderas comunidades cristianas y el combate contra el pecado sería la actividad más importante de todos y cada uno de nosotros. Con ello se desterraría la violencia, el alcoholismo, la pornografía y todo aquello que hoy destruye nuestras familias y nuestra sociedad. Conoce a Jesús… deja que el Espíritu toque tu corazón… conviértete en un apasionado del Evangelio, de Jesús, de su causa de paz y Evangelización. Si continuamos con nuestro estado de indiferencia, seguramente que Dios encontrará el medio de restaurar nuestra sociedad, pero a nosotros nos tomara en cuenta nuestra falta de amor y de interés por el Reino. Tiempo de Cuaresma… tiempo de conversión.

sábado, 27 de marzo de 2010

PROXIMOS PROGRAMAS EN EL MES DE ABRIL!


NOCHES DE AVIVAMIENTO, EL DIA MARTES 6 DE ABRIL, CONDUCCION FERNANDO.

SER HERMANOS, VIERNES 2 DE ABRIL, CONDUCCION MARIA TERESA.

QUISO SER UTIL A SU GENTE, SABADO 10 DE ABRIL, CONDUCCION CLAUDIO.

viernes, 26 de marzo de 2010

NUESTRA PAG. WWW.RADIOVIDASATELITAL.COM.AR

QUERÉS HACERTE AMIGO DE LA RADIO, LLAMANOS!!


RADIO VIDA SATELITAL FM 91.1 MHZ –

GRILLA DE PROGRAMACION

LUNES A VIERNES DE 8:00 A 13:00 HS: Magazine “Despertemos llega Cristo”
LUNES A VIERNES DE 13:00 A 16:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
LUNES DE 16:00 A 17:00 HS: Descubriendo a Dios.
LUNES DE 17:00 A 18:00 HS: La Hora del Encuentro.
LUNES DE 18:00 A 18:30 HS: Música cristiana.
LUNES DE 18:30 A 19:00 HS: Santo Rosario.
LUNES DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
LUNES DE 20:00 A 22:00 HS: María entre el cielo y la tierra.
LUNES DE 22:00 HS HASTA EL DIA MARTES 8:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
MARTES DE 16:00 A 18:30 HS: Prédicas, enseñanzas, música y avances de la emisora.
MARTES DE 18:30 A 19:00 HS: Santo Rosario.
MARTES DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
MARTES DE 20:00 A 21:00 HS: Somos de Cristo.
MARTES DE 21:00 A 22:30 HS: Noche de Avivamiento.
MARTES DE 22:30 HS HASTA EL DIA MIERCOLES 8:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
MIERCOLES DE 16:00 A 18:00 HS: Caminando con María.
MIERCOLES DE 18:00 A 19:00 HS: Paz en la Tormenta.
MIERCOLES DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
MIERCOLES DE 20:00 A 22:00 HS: Te Estoy Acompañando.
MIERCOLES DE 22:00 HS HASTA DEL DIA JUEVES 8:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
JUEVES DE 16:00 A 17:00 HS: Prédicas, enseñanzas, música y avances de la emisora.
JUEVES DE 17:00 A 18:00 HS: Por Amor a Ti.
JUEVES DE 18:00 A 19:00 HS: Legionarias de María.
JUEVES DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
JUEVES DE 20:00 A 21:00 HS: En Concierto.
JUEVES DE 21:00 A 22:00 HS: Renacer.
JUEVES DE 22:00 HS HASTA EL DIA VIERNES 8:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
VIERNES DE 16:00 A 17:00 HS: Vocecitas de la Calle.
VIERNES DE 17:00 a 18:30 HS: Prédicas, enseñanzas, música y avances de la emisora.
VIERNES DE 18:30 A 19:00 HS: Santo Rosario.
VIERNES DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
VIERNES DE 20:00 A 21:30 HS: Levántate Señor.
VIERNES DE 21:30 HS HASTA EL DIA SABADO 8:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
SABADO DE 8:00 A 10:00 HS: El Diácono y la Familia.
SABADO DE 10:00 A 12:00 HS: Tiempo de Folclore.SABADO DE 12:00 A 16:00 HS: Conexión satelital con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
SABADO DE 16:00 A 18:30 HS: Prédicas, enseñanzas, música y avances de la emisora.
SABADO DE 18:30 A 19:00 HS: Santo Rosario.
SABADO DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
SABADO DE 20:00 A 22:00 HS: Prédicas, enseñanzas, música y avances de la emisora.
SABADO DE 22:00 HS HASTA EL DIA DOMINGO 9:00 HS: Conexión con Radio Vaticano, EWTN y Radio Pax Net.
DOMINGO DE 9:00 A 10:00 HS: Misa con el Padre Obispo.
DOMINGO DE 10:00 A 12:00 HS: La Voz del Folclore.
DOMINGO DE 12:00 A 18:00 HS: Música cristiana criolla, Reflexiones de la familia y avances de la emisora.
DOMINGO DE 18:00 A 19:00 HS: Via Crucis.
DOMINGO DE 19:00 A 20:00 HS: Santa Misa.
DOMINGO DE 20:00 HS HASTA EL DIA LUNES 8:00 HS: Conexión con Radio Vaticano, EWTN, Radio Pax Net.

miércoles, 24 de marzo de 2010

FE Y SOLO FE....


«Una realidad muy sencilla»
Al abrir el Evangelio, cada uno puede decirse: estas palabras de Jesús son un poco como una carta muy antigua que me fuera escrita en una lengua desconocida; puesto que me está dirigida por alguien que me ama, intento comprender el sentido de ella, y enseguida pondré en práctica en mi vida lo poco que comprenderé de ella…
No son los amplios conocimientos lo que importa en un comienzo. Éstos tendrán su gran valor. Pero es a través del corazón, en las profundidades de sí mismo, que el ser humano comienza a comprender el Misterio de la Fe. Los conocimientos llegarán más tarde. No se nos da todo de una vez. Una vida interior se elabora paso a paso. Hoy más que ayer, nos adentramos en la fe avanzando por etapas.
En lo más profundo de la condición humana descansa la espera de una presencia, el silencioso deseo de una comunión. Nunca lo olvidemos, ese simple deseo de Dios es ya el comienzo de la fe.
Además, nadie llega a comprenderlo todo acerca del Evangelio por sí solo. Cada uno puede decirse: en esta comunión única que es la Iglesia, lo que no comprendo de la fe, otros lo comprenden y viven de ello. No me apoyo únicamente en mi fe, sino en la fe de los cristianos de todos los tiempos, la fe de aquellos que nos han precedido, desde la Virgen María y los apóstoles hasta los de hoy en día. Y día tras día me dispongo interiormente a poner mi confianza en el Misterio de la Fe.
Y es así como la fe, la confianza en Dios, se muestra como una realidad muy sencilla, tan sencilla que todos podrían acogerla. La fe es como un impulso vuelto a tomar mil veces a lo largo de la existencia y hasta el último soplo

PALABRA DE VIDA!!!!!!!!!


El Evangelio de hoy

Primera Lectura (Lectio Divina)
Daniel 3, 14-20. 49-50. 91-92. 95En aquellos días dijo el rey Nabucodonosor; "¿Es cierto, Sedrak, Mesak y Abednegó, que no quieren servir a mis dioses, ni adorar la estatua de oro que he mandado levantar? Pues bien, si no es cierto, estén dispuestos para que, al oír sonar el cuerno, la flauta, la cítara, el salterio, la chirimía y toda clase de instrumentos, se postren y adoren la estatua que he mandado hacer. Pero si no la adoran, serán arrojados inmediatamente a un honro encendido. ¿Y qué dios podrá librarlos entonces de mis manos?"Pero Sedrak, Mesak y Abednegó contestaron al rey Nabucodonosor: "No es necesario responder a tu pregunta, pues el Dios a quien servimos puede librarnos del horno encendido y nos librará de tus manos; y aunque no lo hiciera, sábete que de ningún modo serviremos a tus dioses, ni adoraremos la estatua de oro, que has mandado levantar".Entonces Nabucodonosor se enfureció y la expresión de su rostro cambió para Sedrak, Mesak y Abednegó. Mandó encender el horno y aumentar la fuerza del fuego siete veces más de lo acostumbrado. Después ordenó que alguno de los hombres más fuertes de su ejército ataran a Sedrak, Mesak y Abednegó y los arrojaran al horno encendido.Pero el ángel del Señor bajó del cielo, se puso junto a ellos, apartó las llamas y produjo en el horno un frescor como de brisa y de rocío, y el fuego no los atormentó, ni los hirió, ni siquiera los tocó. El rey Nabucodonosor, estupefacto, se levantó precipitadamente y dijo a sus consejeros: "¿Acaso no estaban atados los tres hombres que arrojamos al honro?" Ellos contestaron: "Sí, señor". El rey replicó: "¿Por qué, entonces, estoy viendo cuatro hombres sueltos, que se pasean entre las llamas, sin quemarse? Y el cuarto, parece un ángel".Nabucodonosor los hizo salir del horno y exclamó: "Bendito sea el Dios de Sedrak, Mesak y Abednegó, que ha enviado a su ángel para librar a sus siervos, que confiando en él, desobedecieron la orden del rey y expusieron su vida, antes que servir y adorar a un dios extraño".+ Meditatio
La verdadera fe se expresa en la fidelidad y la fidelidad se expresa en los momentos de crisis, cuando se puede perder todo, cuando todo puede depender de nuestra actitud hacia Dios, cuando preferimos, incluso la misma muerte, que el ofender a Dios con nuestra infidelidad. Si muchas veces notamos en nuestra comunidad cristiana tibieza, la causa es una falta de compromiso y de fidelidad TOTAL a Dios. En este pasaje hemos leído como estos tres hombres fueron capaces de desobedecer al rey, y con ello pusieron en juego su propia vida. Ellos sabían que Dios es poderoso para salvarlos, sin embargo, su fidelidad no estaba basada en la posibilidad de que Dios los salvara, pues a pesar de que ésto no sucediera, ellos jamás le serían infieles.Pensemos en cuántas veces nosotros le hemos dicho a Dios: "Haré esto o lo otro si tú me das a cambio..." Nuestro Dios no es un Dios de "trueques". Le amamos o no le amamos, le somos o no fieles, sin que ésto dependa de lo que nos pueda o quiera dar. Por ello, la crisis y la tentación son la mejor oportunidad que tenemos para probarle a Dios si verdaderamente le amamos y le somos fieles.+ Oratio
Bendito seas, Señor Dios, pues eres grande, poderoso, misericordioso y protector. Quiero agradecerte por todas las ocasiones en que me has librado de las llamas del enemigo; todas aquellas ocasiones en que no has permitido que sucumba ente la tentación y me has dado de tu gracia para mantenerme fiel. Quiero decirte, Señor, que es mi deseo permanecer fiel a ti, y que aun cuando mi vida estuviera en riesgo por causa de ello, estoy dispuesto a permanecer firme hasta el final, pues mi anhelo eres tú, Señor, y sé que si soy fiel estaré a tu lado eternamente; dame de tu Espíritu Santo para tener la fuerza necesaria a la hora de la prueba. Amén.+ Operatio
Hoy, en mi trabajo o con mis conocidos, haré algo que me evidencíe como verdadero cristiano delante de los que están a mi alrededor. A partir de hoy no volveré a ser un cristiano a escondidas, sino que expresaré mi fe libremente sin importar los costos que eso implique.
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El Evangelio de hoy
Juan 8, 31-42En aquel tiempo, Jesús dijo a los que habían creído en él: "Si se mantienen fieles a mi palabra, serán verdaderos discípulos míos, conocerán la verdad y la verdad los hará libres". Ellos replicaron: "Somos hijos de Abraham y nunca hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: '‘Serán libres'‘?"Jesús les contestó: "Yo les aseguro que todo el que peca es un esclavo y el esclavo no se queda en la casa para siempre; el hijo sí se queda para siempre. Si el Hijo les da la libertad, serán realmente libres. Ya sé que son hijos de Abraham; sin embargo, tratan de matarme, porque no aceptan mis palabras. Yo hablo de lo que he visto en casa de mi Padre: ustedes hacen lo que han oído en casa de su padre".Ellos le respondieron: "Nuestro padre es Abraham". Jesús les dijo: "Si fueran hijos de Abraham, harían las obras de Abraham. Pero tratan de matarme a mí, porque les he dicho la verdad que oí de Dios. Eso no lo hizo Abraham. Ustedes hacen las obras de su padre". Le respondieron: "Nosotros no somos hijos de prostitución. No tenemos más padre que a Dios".Jesús les dijo entonces: "Si Dios fuera su Padre me amarían a mí, porque yo salí de Dios y vengo de Dios; no he venido por mi cuenta, sino enviado por él".+ Reflexión
Estamos por terminar nuestra Cuaresma y la palabra de Jesús resuena con fuerza en nuestro corazón: "Yo los he venido a liberar para que no sean más esclavos del pecado". Y es que la obra de nuestra liberación es una obra de Dios, no es algo que nosotros podamos hacer por nuestras propias fuerzas. Piensa, ¿cuántas veces te has hecho el propósito de salir de una debilidad o de un pecado en el cual frecuentemente te ves envuelto? Te darás cuenta que por más esfuerzos humanos que has hecho, el pecado o la debilidad permanecen. Es solamente cuando le dejamos campo abierto a Dios para que obre en nuestra vida cuando seremos verdaderamente liberados. Conozco mucha gente que vivía atada a algún vicio o a alguna pasión que la llevaba frecuentemente al pecado y que no se han visto liberados hasta que no se han rendido al poder liberador de Dios; sólo cuando han dicho como Pedro que se hundía en el agua: ¡Sálvame Señor, no puedo más!Nuestras prácticas cuaresmales lo único que hacen es abrir el camino para que Dios nos salve. Es necesario reconocer nuestra incapacidad de vencer el pecado, y gritarle con todas nuestras fuerzas: ¡Señor libérame, no quiero ser más esclavo! Esto te comprometerá a ser ahora siervo del Evangelio, pero te dará la felicidad de la libertad. ¿Qué esperas?

martes, 16 de marzo de 2010

PADRE PIO, MILAGRO DE DIOS!!!!!!!







EXPONEN EL CUERPO INCORRUPTO DEL PADRE PIO, MUERTO HACE 40 AÑOS
REALMENTE IMPRESIONANTE!!!!!! EXPONEN EL CUERPO INCORRUPTO DEL PADRE PIO, MUERTO HACE 40 AÑOS No se realizó momificación alguna (de todas formas, ningún proceso de momificación logra este tipo de preservación)Santo Padre Pío: ¡ruega por nosotros!El está disfrutando de la Gloria después de tantos sufrimientos (único sacerdote conocido que sufrió los estigmas visibles de la Pasión). Está científicamente documentado que no fueron autoinfligidas como quiere hacer creer la prensa en manos del enemigo. Que sepamos ofrecer a Dios amor. Invirtamos bien nuestra vida: pongamos la esperanza en los bienes incorruptibles: en los bienes del alma. Nada os podremos llevar a la Vida eterna, nada quedará, sólo la caridad que hayamos volcado en cada segundo… ése es el mayor beneficio que podemos conservar. Oremos los unos por los otros, meditemos en nuestras acciones diarias y en nuestros objetivos verdaderos.

lunes, 15 de marzo de 2010

EL ANGELUS, RESALO SI PODES A LAS 12HS.EN COMUNION CON TODOS NUESTROS HERMANOS.



EL ANGELUS
V. El Ángel del Señor lo anunció a María.R. Y concibió por obra del Espíritu Santo. Dios te salve, María… Santa María…
V. He aquí la esclava del Señor.R. Hágase en mí según tu palabra. Dios te salve, María… Santa María…
V. El Verbo se hizo carne.R. Y vivió entre nosotros. Dios te salve, María…Santa María…
V. Rogad por nosotros,Santa Madre de Dios.R. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Oración: Infundid, Señor, vuestra gracia en nuestras almas, para que, pues hemos creído la Encarnación de vuestro Hijo y Señor nuestro Jesucristo anunciada por el Ángel, por los merecimientos de su Pasión y Muerte, alcancemos la gloria de la Resurrección. Amén.

domingo, 14 de marzo de 2010

DOCUMENTO.


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Cuaresma y la ascésis
La Cuaresma, ha sido siempre considerada en la Iglesia como un tiempo propicio para crecer en la santidad dejando que Dios purifique, mediante nuestra oración, nuestros corazones. Ha sido, al mismo tiempo, un espacio en la vida del cristiano para reforzar su vida penitencial o ascética, sin la cual difícilmente permitirá que Dios lo lleve a conocer la perfección de su amor.
Desafortunadamente, el hombre de hoy tiene un concepto equivocado de lo que es la Ascesis o penitencia y en muy baja estima el valor de la cruz. La vida cómoda y materialista que vive le hace despreciar con facilidad estos dos valores que son fundamentales (cf. Mt 10,38), por no decir, indispensables, en la vida, no solo para alcanzar la santidad y con ello la plenitud, sino incluso para poder vivir una vida razonablemente alegre y estable.
La Ascesis, como esfuerzo humano que responde a la iniciativa divina disponiendo y purificando su vida para que en ella se desarrolle en plenitud la vida divina, no es prerrogativa exclusiva del cristiano ya que, como dice el P. Bernard: " esta palabra ha venido a significar el esfuerzo mediante el cual, se quiere alcanzar el progreso en la vida moral y religiosa" . Este esfuerzo, en nuestra vida cristiana adquiere una nota particular y quizás única, ya que, a diferencia de algunas otras "espiritualidades", la Ascesis en el fiel cristiano, es animada y dirigida por el mismo Espíritu Santo, que no busca destruir sino construir. Por ello el P. Cantalamessa, dice que la Penitencia es el arte de quitar todo lo que estorba en el hombre a fin de hacer visible esa santidad ya contenida en el hombre desde el bautismo.
De la misma manera que la vida interior es el instrumento para que la santidad crezca y se desarrolle, la Penitencia es la herramienta de la que se vale el hombre para fortalecer los muros por lo cuales transitan nuestros deseos y aspiraciones, los cuales, fuera de control son capaces de destruir la vida o al menos impedir que ésta alcance la plenitud. Es, digamos, el elemento regulador, y, en muchos casos, el propulsor de la vida equilibrada y santa del hombre.
Y es que la penitencia actúa como una fuerza que empuja nuestras pasiones y deseos hacia el centro poniendo límites cada vez más estrechos, hasta lograr el equilibrio. En algunos casos agregando elementos a nuestra vida, "Ascesis positiva" , y en otros ayudando a eliminarlos o matizarlos, "Ascesis negativa" . En ambas direcciones se supone una renuncia, por lo que esto no se podrá hacer sin la ayuda de la cruz y del Espíritu Santo.
La penitencia cristiana, correctamente entendida, no es estoicismo, ni platonismo, sino es la " fuerza que ayuda a que los criterios y la vida evangélica, pasen de la mente al corazón y del corazón a la vida diaria". Debemos, sin embargo, reconocer que la penitencia y la cruz, producto de ésta, pesan sobre nuestras espaldas, de lo contrario ya no sería cruz (cf. Mt 5,29-30); la mortificación lastima, mas en el fondo del alma se enciende un fuego nuevo, desconocido y de orden superior que basta para fortificarlo y hacerle abrazar voluntaria y animosamente los dolores y la renuncia que lo llevarán a gozar de la más profunda y jamás imaginada paz. Este fuego era el que incendiaba a los santos, quienes ante la perspectiva de haber encontrado la perla preciosa (Mt 13,46) y el tesoro escondido (Mt 13,44), consideraban en poco lo que tuvieran que hacer para permitir a la gracia desarrollarse en plenitud y que a los ojos del mundo puede parecer una locura y una exageración. Pero sobre este juicio ya san Pablo decía que, " la cruz es locura para el mundo pero para los que están en Cristo es poder de salvación" (cf. 1Cor 1,23-24).
De aquí nace, como lo comenta el Nuevo Diccionario de Espiritualidad, la urgencia de reasumir la vivencia y lo cotidiano de la penitencia, de quitarle toda esa carga negativa que por años ha tenido, para redescubrirla como un momento privilegiado de encuentro con la misericordia de Dios que conoce nuestras miserias y que a pesar de ellas nos ama y nos ha llamado a la santidad más elevada. Esto nos llevará sin lugar a dudas a experimentar el poder que sana el interior del hombre y que le impulsa a reemprender el camino de la felicidad, la alegría, el gozo y la paz, ya que como bien decía Clímaco: "es mediante la penitencia como nos libramos de la tiranía de las pasiones".
Por todo esto, la penitencia es la cruz benéfica que nos ayuda a renunciar a nosotros mismos, a los excesos y exageraciones, y que prepara el camino para que Dios desarrolle en nosotros la vida divina, la "Vida según el Espíritu" .
No obstante todo lo que hemos dicho, incluso de los santos, debemos ser conscientes que la falta de prudencia, puede también desordenar la misma penitencia, con lo cual se causan graves daños, sobre todo al alma, ya que la práctica de la mortificación debe ser siempre un acto de templanza. Santo Tomas, citando a San Jerónimo dice: "No hay diferencia entre matarse en largo o en corto tiempo. Se comete una rapiña, en vez de hacerse una ofrenda, cuando se extenúa inmoderadamente [sin templanza] el cuerpo por la demasiada escasez [exceso] de alimento o el poco [defecto] de sueño".
Una de las prácticas más comunes en la penitencia dentro de la Iglesia es el Ayuno, el cual nos lleva a ser más dueño de nosotros mismos al entrenarnos, privándonos de las cosas buenas como son la comida y otros placeres de la vida, para en su momento tener la capacidad de renunciar a lo que es pecado. Es un ejercicio que debe siempre iniciarse por las cosas pequeñas, si luego queremos aspirar a las grandes. De manera que si quisiéramos llegar a hacer un ayuno riguroso a pan y agua, debemos de haber iniciado muchos meses antes con las pequeñas privaciones. El privarse de un café, en el momento en que se antoja, de un vaso de agua, de nuestro postre preferido, etc., nos proveerán los elementos necesarios para llegar a tener una verdadera vida ascética.
Por una ancestral tradición en la Iglesia, existen dos días especiales para el ayuno que son: El Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo. Además, recordando la pasión del Señor, invita a los fieles a hacer penitencia todos los viernes del año y de manera especial durante los viernes de cuaresma.
Por lo que toca al ayuno, la Iglesia, buscando ayudar a los fieles a caminar en esta vía penitencial, ha "normado" esta práctica. Actualmente sugiere que el ayuno consiste en: Un vaso de leche o un café con pan en la mañana; nada entre comidas; una comida ligeramente reducida (frugal) y por la noche un café con pan.
Las primeras comunidades encontraron que el privarse el viernes de comer "carne" era una manera de renunciar a lo superfluo, comiendo pescado que era un alimento muy económico y además era el que comían los pobres. De esta manera no solo se dominaba el apetito sino que la diferencia económica entre el pescado y la carne se repartía como limosna a los pobres. Sin embargo, ¿Podríamos hoy decir que el no comer carne es efectivamente un acto de penitencia? Si somos honestos con nosotros mismos debemos responder que no (al menos para muchos hermanos). Y es que hoy en día el kilo de pescado y el de carne están más o menos a la misma altura… incluso a veces más caro el pescado, sobre todo en el tiempo de Cuaresma en el que en ocasiones se da un abuso en el precio. El ir a comer a un restaurante un buen filete de pescado, tampoco parecería ser una verdadera penitencia. Mucho menos si pensamos que la gente pobre de nuestro país no come carne NUNCA. El día de abstinencia debe ser un día de verdadera penitencia… día de austeridad y de renuncia. Ciertamente para algunos el no comer carne puede ser una verdadera penitencia, pero no para los hermanos que viven en una situación de marginación (aun para la clase media). Si quisiéramos recuperar el espíritu que animó a los primeros a hacer penitencia los viernes, deberíamos pensar en la comida que comen los pobres, que en nuestro caso, estaríamos hablando de frijoles y tortillas. El viernes de cuaresma es un día para hacer penitencia y no para comer pescado.
Aprovechemos este tiempo de Cuaresma para crecer en nuestra vida de santidad y permitir a Dios tomar más participación en nuestra vida. Una cuaresma vivida con intensidad nos ayudará a celebrar la pascua con la alegría y el gozo de quien se ha esforzado por alcanzar la estatura del varón perfecto que es Jesucristo.

AMADOS POR JESUS!



Domingo 14 de Marzo del 2010
Comentaba recientemente, en nuestros ejercicios cuaresmales, como Dios va “cincelando” en nosotros la imagen de su amado hijo Jesucristo. En este tremendo trabajo de desbaste, muchas veces nos sentimos “agredidos” por Dios pues la forma de modelar y extraer de nosotros esa maravillosa imagen no siempre es agradable y apacible (quizás así lo sentiría el mármol cuando el artista levanta el martillo contra ella). Con esta visión es como podemos entender todo lo que va ocurriendo en nuestra vida… es desde aquí desde donde podemos entender las palabra de san Pablo: “Todo coopera (conviene) para aquellos que aman al Señor”. Esto va desde las cosas que nos agradan y nos hacen sentir bien, hasta las más incomodas y dolorosas por las que tenemos que atravesar. En cada una de ellas está la mano amorosa del Artista que no descansará hasta ver su obra terminada. Esto es importante entenderlo sobre todo en los momentos de más dificultad, pues son en los que Dios purifica su obra de arte. Es en el dolor, como dice la Escritura, “en donde se le da temple y firmeza al metal precioso”. No debemos temer a los infortunios de la vida, pues todos ellos sirven para que nuestra vida se vaya purificando. Y no es que Dios quiera o desee las enfermedades, accidentes y fenómenos meteorológicos que pueden hacer sufrir al hombre… todo esto ocurre por la fragilidad de nuestro mundo contingente y que se va desgastando. Más bien, Dios utiliza todo esto en nuestro favor, dándonos la fuerza y la alegría para superarlo mientras con ello nos ayuda a depender más de él, a darnos cuenta de la fragilidad del mundo que nos rodea y especialmente de nuestro cuerpo, para que así dependamos cada día más de él. Debemos estar seguros de que jamás nos abandona, y mucho menos en los momentos de dificultad. Tengamos confianza en su amor providente y permitamos que culmine en nosotros su obra de amor.

sábado, 6 de marzo de 2010


MENSAJE DEL PAPA BENEDICTO XVI PARA LA CUARESMA 2010

El Sábado, 06 de febrero de 2010 a las 22:07
Mensaje del Papa Benedicto XVI para la Cuaresma 2010. El texto, fechado el 30 de Octubre de 2009, lleva por tيtulo la siguiente afirmaciَn de San Pablo en su Carta a los Romanos: “La justicia de Dios se ha manifestado por la fe en Jesucristo”. Este es un resumen del Mensaje Papal:"Cada aٌo, con ocasiَn de la Cuaresma, la Iglesia nos invita a una sincera revisiَn de nuestra vida a la luz de las enseٌanzas evangélicas. Este aٌo quiero proponeros algunas reflexiones sobre el vasto tema de la justicia, partiendo de la afirmaciَn paulina: La justicia de Dios se ha manifestado por la fe en Jesucristo (cf. Rm 3,21-22).Me detengo, en primer lugar, en el significado de la palabra "justicia", que en el lenguaje comْn implica "dar a cada uno lo suyo" - "dare cuique suum", segْn la famosa expresiَn de Ulpiano, un jurista romano del siglo III. Sin embargo, esta clلsica definiciَn no aclara en realidad en qué consiste "lo suyo" que hay que asegurar a cada uno. Aquello de lo que el hombre tiene mلs necesidad no se le puede garantizar por ley. Para gozar de una existencia en plenitud, necesita algo mلs يntimo que se le puede conceder sَlo gratuitamente: podrيamos decir que el hombre vive del amor que sَlo Dios, que lo ha creado a su imagen y semejanza, puede comunicarle. Los bienes materiales ciertamente son ْtiles y necesarios (es mلs, Jesْs mismo se preocupَ de curar a los enfermos, de dar de comer a la multitud que lo seguيa y sin duda condena la indiferencia que también hoy provoca la muerte de centenares de millones de seres humanos por falta de alimentos, de agua y de medicinas), pero la justicia "distributiva" no proporciona al ser humano todo "lo suyo" que le corresponde. Este, ademلs del pan y mلs que el pan, necesita a Dios. Observa san Agustيn: si "la justicia es la virtud que distribuye a cada uno lo suyo... no es justicia humana la que aparta al hombre del verdadero Dios" (De Civitate Dei, XIX, 21).El anuncio cristiano responde positivamente a la sed de justicia del hombre, como afirma el Apَstol Pablo en la Carta a los Romanos: "Ahora, independientemente de la ley, la justicia de Dios se ha manifestado... por la fe en Jesucristo, para todos los que creen, pues no hay diferencia alguna; todos pecaron y estلn privados de la gloria de Dios, y son justificados por el don de su gracia, en virtud de la redenciَn realizada en Cristo Jesْs, a quien exhibiَ Dios como instrumento de propiciaciَn por su propia sangre, mediante la fe, para mostrar su justicia (Rm 3,21-25).؟Cuلl es, pues, la justicia de Cristo? Es, ante todo, la justicia que viene de la gracia, donde no es el hombre que repara, se cura a sي mismo y a los demلs. El hecho de que la "propiciaciَn" tenga lugar en la "sangre" de Jesْs significa que no son los sacrificios del hombre los que le libran del peso de las culpas, sino el gesto del amor de Dios que se abre hasta el extremo, hasta aceptar en sي mismo la "maldiciَn" que corresponde al hombre, a fin de transmitirle en cambio la "bendiciَn" que corresponde a Dios (cf. Ga 3,13-14). Pero esto suscita en seguida una objeciَn: ؟qué justicia existe dَnde el justo muere en lugar del culpable y el culpable recibe en cambio la bendiciَn que corresponde al justo? Cada uno no recibe de este modo lo contrario de "lo suyo"? En realidad, aquي se manifiesta la justicia divina, profundamente distinta de la humana. Dios ha pagado por nosotros en su Hijo el precio del rescate, un precio verdaderamente exorbitante. Frente a la justicia de la Cruz, el hombre se puede rebelar, porque pone de manifiesto que el hombre no es un ser autلrquico, sino que necesita de Otro para ser plenamente él mismo. Convertirse a Cristo, creer en el Evangelio, significa precisamente esto: salir de la ilusiَn de la autosuficiencia para descubrir y aceptar la propia indigencia, indigencia de los demلs y de Dios, exigencia de su perdَn y de su amistad.Se entiende, entonces, como la fe no es un hecho natural, cَmodo, obvio: hace falta humildad para aceptar tener necesidad de Otro que me libere de lo "mيo", para darme gratuitamente lo "suyo". Esto sucede especialmente en los sacramentos de la Penitencia y de la Eucaristيa. Gracias a la acciَn de Cristo, nosotros podemos entrar en la justicia "mلs grande", que es la del amor (cf. Rm 13,8-10), la justicia de quien en cualquier caso se siente siempre mلs deudor que acreedor, porque ha recibido mلs de lo que podيa esperar.Precisamente por la fuerza de esta experiencia, el cristiano se ve impulsado a contribuir a la formaciَn de sociedades justas, donde todos reciban lo necesario para vivir segْn su propia dignidad de hombres y donde la justicia sea vivificada por el amor.Queridos hermanos y hermanas, la Cuaresma culmina en el Triduo Pascual, en el que este aٌo volveremos a celebrar la justicia divina, que es plenitud de caridad, de don y de salvaciَn. Que este tiempo penitencial sea para todos los cristianos un tiempo de auténtica conversiَn y de intenso conocimiento del misterio de Cristo, que vino para cumplir toda justicia. Con estos sentimientos, os imparto a todos de corazَn la bendiciَn apostَlica".

miércoles, 3 de marzo de 2010

BICENTENARIO DE LA PATRIA CON MARIA


BICENTENARIO DE LA PATRIA CON MARIA CONSTRUYAMOS UNA PATRIA PARA TODOS EL 8 DE MAYO DE 2010 A LAS 15 HORAS UNA NUEVA LUZ PARA LA ARGENTINANo se suspende por lluviaTraé tu bandera y vela Venga con nosotros, cumpla con la promesa con la VIRGEN DE LUJAN Viernes 7 y sabado 8 de MAYO de 2010 108º PEREGRINACION A PIE A LUJAN Partida: Viernes 17 hs. Basilica de San Jose de Flores(av.Rivadavia 6950 Buenos Aires)Llegada: SABADO 8 DE MAYO A LAS 15 HS.TRAE UN ALIMENTO NO PERECEDERO PARA COLABORAR CON CARITAS Informes: 4257-6115 / 4301-0142 / 4629-4845 / 4714-3525 DEPARTAMENTO DE LAICOS CONFERENCIA EPISCOPAL ARGENTINA Sociedad Peregrinos a pie a Santuario de Ntra.Sra. de LUJAN

martes, 2 de marzo de 2010

ORACION POR NUESTROS HERMANOS CHILENOS.


SEÑOR TEN PIEDAD DE TODOS NOSOTROS, TE NECESITAMOS HOY Y SIEMPRE, TE PEDIMOS POR NUESTROS HERMANOS CHILENOS AYUDALOS A PASAR ESTE MOMENTO, BENDICELOS Y LLENALOS DE TU AMOR, AMEN.

DOCUMENTO SOBRE EL AYUNO

El ayuno, ¿para qué?
El ayuno, ¿para qué?
En la Palabra podemos encontrar diferentes tipos de ayuno que nos iluminan sobre el poder que tiene esta práctica espiritual en la vida del cristiano y de toda la comunidad. Algunos son ayunos de un día, otros de tres, y hasta otros de tres semanas ó 40 días. A continuación te presento la forma y los resultados que ha tenido esta práctica espiritual en la vida de los hombres de Dios.
1. El ayuno nos ayuda a superar la Crisis.
En el Antiguo Testamento encontramos una historia fascinante de Esther, quien sufría al saber que Amán, el Primer Ministro de la región, tenía como propósito la destrucción de la raza Judía que habitaba en Babilonia. Al mismo tiempo, Amán tenía planeado matar al tío de Esther, Mardoqueo (un judío), colgándolo públicamente.
Esther le comentó a su tío Mardoqueo: "Ve y reúne a todos los judíos que se hallen en Susa, y ayunen por mí, y no coman ni beban en tres días, noche y día; yo también con mis doncellas ayunaré igualmente...". (Est 4, 16).
Como resultado del ayuno de tres días, no sólo la vida de Mardoqueo fue salvada, sino la de todo el pueblo. Los enemigos del pueblo fueron destruidos (Ester 7, 10).
2. El ayuno favorece el encuentro divino.
El Segundo ayuno descrito en la Palabra es el ayuno parcial de veintiún días para preparase al encuentro con Dios. El profeta Daniel escribe: "En aquellos días yo, Daniel, estuve afligido por espacio de tres semanas. No comí manjar delicado, ni entró en mi boca carne ni vino, ni me ungí con ungüento, hasta que se cumplieron las tres semanas" (Dn10, 2-3).
Con ello, el profeta se preparó para recibir la visita del ángel que traía un mensaje de Dios para el pueblo: "He venido para hacerte saberlo que ha de venir a tu pueblo en los postreros días; porque la visión es para esos días" (Dn 10, 14).
El ayuno nos permite eliminar la cortina que nos impide tener un encuentro más íntimo e iluminador con Dios.
3. El ayuno nos ayuda a tener dominio sobre el pecado y el demonio.
Los ayunos bíblicos fueron establecidos por el Señor para que participáramos con él en el combate espiritual, mejorando nuestra resistencia al pecado, ya que al tener más dominio de nuestras pasiones será más fácil la victoria. Por otro lado, el ayuno nos permite tener más claridad en las trampas que el demonio nos pone para evitar que realicemos la voluntad de Dios. El ejemplo más claro lo tenemos en el primer Adán, el cual, engañado por el demonio, no obedeció la orden de “ayunar”. Recordemos que Dios le había pedido que se abstuviera de comer del “árbol de la ciencia del bien y del mal” (Gen 2, 16-17). Le ganaron sus pasiones, pues “viendo que era bueno y gustoso para comer, tomó del fruto del árbol” (Gén 3, 6). El segundo Adán, Jesucristo, el Señor, después de ayunar 40 días, tenía poder en su vida y luz en el alma y el demonio no pudo tentarlo, no lo convenció. Las pasiones de Cristo estaban ancladas en la voluntad de su Padre del cielo y por ello nada de lo que le ofreció el demonio fue capaz de seducirlo (Mt 4, 1-11).
Por este motivo instruía Jesús a sus apóstoles diciéndoles “velen y oren para que no caigan en la tentación” (Mt 26, 41). Un cristiano que no tiene ayuno en su vida no podrá jamás terminar victorioso. Siempre estará bajo el yugo de su carne y de sus pasiones.
4. El ayuno nos permite descubrir nuestro pecado.
En el Antiguo Testamento Dios le pidió al Pueblo que apartaran un día al año —el Día de Expiación— para auto-examinarse en su estado espiritual, para no engañarse y descubrir que sólo él es Señor y ante esto, doblegarse y pedir perdón de los pecados (Lev 23, 27).
Cuando ayunamos, la luz del Espíritu viene a nuestro corazón y descubrimos nuestra miseria; la debilidad que el ayuno produce nos hace reconocer nuestra miseria, nuestra fragilidad, la necesidad de Dios. Esto nos lleva a pedir su ayuda y su fuerza, a convertirnos en dependientes de su amor y poder. Jesús nos los decía “sin mí nada pueden hacer” (Jn 15, 5).
5. El ayuno nos da poder contra el maligno
Cuando ayunamos, la fuerza liberadora de Jesús actúa en nosotros y podemos desterrar de nosotros y de nuestros hermanos la acechanza del demonio, sea en la tentación o en la perturbación. El evangelio nos cuenta cómo los discípulos no pudieron echar fuera a un demonio, porque “esta clase de demonio sólo sale a base de ayuno y oración” (Mt 17, 21). El ayuno fortalece la autoridad espiritual en el hombre para que no solo tenga dominio sobre sí mismo, sino contra toda potencia o dominación que esté buscando perturbarlo a él o a sus hermanos.
Jesús nos dijo en el evangelio que sus seguidores también ayunaríamos, es, pues, tiempo de retomar este ejercicio espiritual tan necesario y benéfico para la vida cristiana.
CONSIDERACIONES GENERALES AL AYUNAR.
El ayuno es una práctica Espiritual para el dominio de las pasiones y para que nuestra vida espiritual crezca y se solidifique. Sin embargo, es conveniente tener en cuenta algunas recomendaciones que pueden ayudarnos a que este sea más fructuoso.
Esto elementos son importantes, ya que muchas veces, debido a nuestros compromisos laborales o de otra índole, no podremos observar todos los puntos que aquí se mencionan. Eso no debe ser causa de que no ayunemos. Aún en ayuno podemos hacer nuestras actividades normales. Pero procuremos tratar de observar la mayor parte de las siguientes recomendaciones según nos sea posible cuando ayunemos:
1.- Mantén tu ayuno lo más privado posible como nos lo pide el Señor. (Mt 6, 16-18).
2.- Mantente en oración. Sobre todo procura confesarte a la brevedad posible. Antes de hacerlo, pide que Dios te muestre todas las faltas que no ves para que no haya estorbo en las peticiones y resistir la tentación de comer. Este es ya uno de los primeros frutos del ayuno (Mt 17, 21; 26, 41). Entre otros instrumentos te puedo sugerir orar con los Salmos. Te propongo: Sal 15; Sal 22; Sal 28; Sal 38; Sal 51; Sal 103; Sal 127; Sal 139.
3.- Alimenta tu espíritu leyendo la Biblia. Recuerda que "no solo de pan vive el hombre sino de toda palabra que viene de Dios (Mt 4, 4). En este aspecto puedes seleccionar algunos pasajes que estén relacionados con lo que tú quieres obtener para tu vida.
4.- Procura empezar con cosas pequeñas: postres, refrescos, verduras; evitar la carne (pollo, pescado, res y cerdo), cigarro, alcohol, etc. En la medida en que tengas más fuerza podrás ir sustituyendo las comidas por solo pan y agua.
5. Camina hacia lo profundo. Después de este primer ejercicio de ayuno, puedes intentar uno en el cual sólo comas frutas y verduras, como el profeta Daniel (Dn 1, 8-15; 10, 3). En este, en las comidas, sólo comerás verduras y ensalada (ésta puede aderezarse con vinagre y aceite o con limón y sal). En este ayuno es conveniente que a media tarde y media mañana comas unas tres o cuatro almendras o nueces.
6. Sé perfecto. Una vez superado este ayuno podrás ya ayunar a pan y agua. Este consiste en tomar durante todo el día sólo pan y beber agua. Te recomiendo, sobre todo si tienes una jornada intensa de trabajo, que mezcles el agua con un poco de miel (una cucharadita por litro de agua) y al menos unas tres veces al día come a media mañana y a media tarde un pan con miel (una cucharada de miel), esto te recobrará las fuerzas.
7. Escoge el momento. Dentro de tus posibilidades, procura hacerlo en días que no tengas muchos compromisos y en lugares donde no haya muchas distracciones, sobre todo si vas a hacer ya un ayuno más severo (Mt 6, 6).
8. Establece la duración. Dependiendo de tus compromisos y la práctica que ya tengas en este ejercicio o lo que Dios te dirija. Sólo recuerda que: Dios está más interesado en la actitud de tu corazón que en la duración del ayuno. Dios no va a contestar tus oraciones dependiendo de la cantidad que ores, sino de qué tan sinceramente ores. Lo mismo se aplica al ayuno (Mt 6, 7-8).
9.- El aseo personal y el ejercicio. Recuerda que es una práctica espiritual y que por ello sólo tú debes saber que lo estás haciendo. Si harás un ayuno más prolongado, no dejes el ejercicio, aunque sea poco para mantener la vitalidad en tu cuerpo. Cuando se ayuna bajo la gracia de Dios gran parte de la energía para la vida llega misteriosamente por la obra del Espíritu. Ordinariamente no te faltará fuerza. Sin embargo, la oración debe ser nuestro principal ejercicio y nuestro alimento fundamental para no desfallecer.
10.– El ayuno es algo que todos podemos hacer. No hay edad para ayunar, se puede hacer desde los bebés hasta los ancianos, como nos lo muestran diferentes pasajes de la Escritura (Joel 2, 15-16). Aun los enfermos pueden privarse de algo. Siempre de acuerdo con las indicaciones del médico.
FACTORES QUE IMPIDEN AYUNAR A LOS CRISTIANOS
Existen algunas ideas y factores que han hecho que nuestros cristianos no ayunen. Te propongo algunas de ellas para que las superes si alguna de ellas llega a afectar tu vida.
1.- La falta de conocimiento, práctica e interés sobre este tema. En general, la gente no sabe ni qué es ni cómo ayunar (Os 4, 6).
2.- La oposición satánica para que no se hable de él ni se practique. Sabe que en un cristiano que ora y ayuna no tienen participación sus acciones tentadoras, y menos las perturbadoras (Mt 17, 21).
3.- El placer y el trabajo en que están ocupados los cristianos. No hay tiempo. Hay una gran promoción por parte del mundo actual de la COMODIDAD Y EL HEDONISMO (2 Tim 3, 4).
4.- La falta de resultados en el pasado. Muchos no obtuvieron en el pasado lo que deseaban al practicar el ayuno y la oración. Pensando que no es tan efectiva, la abandonan, cuando lo más seguro es que haya algo en sus vidas que necesita ser tratado (St 4, 2).
5.- Las adicciones que han invadido a la comunidad. Hay muchas sustancias aceptadas socialmente que producen de una ligera a moderada dependencia. Este tipo de sustancias a veces se les clasifica como drogas blandas. Los cristianos que no pueden dejar de fumar, tomar calmantes, tomar bebidas con alcohol, necesitan ayunar para romper estas cadenas. Sin embargo, las personas acostumbradas a dichas sustancias suelen sufrir malestares físicos durante el ayuno y por eso lo abandonan. Recordemos que Jesús nos dijo que era necesario tomar la cruz (Mt 16, 24)
6.- El temor a no comer. El dominio del espíritu de glotonería. (Fil 3, 17-19; Lc 21, 34; Prov 23, 21).
7.- El espíritu egoísta de la época. (Prov 16, 26).
Que Dios nuestro Señor te fortalezca en esta práctica. Verás en poco tiempo resultados sorprendentes en tu vida espiritual, sobre todo en el dominio de ti mismo, de tus tentaciones y una comunión más plena con Dios.
Como María, todo por Jesús y para Jesús.
Ernesto María Caro, Sac.

ORACION MARIANA

Conocer para amar
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Oracion Oración Mariana
Si queremos que nuestra oración y la oración de la Iglesia sea verdaderamente una fuente de crecimiento espiritual, ésta debe ser como la oración de María, es decir ha de ser: Simple. Es la oración que brota del corazón, de aquellos que saben como María que en hacer la voluntad del Padre está la felicidad; para ellos no hay lugares especiales, ni posiciones, ni palabras. Cualquier momento y lugar es apto para decir: "Mi alma glorifica al Señor y mi espíritu se goza en su presencia". Perseverante y confiada. María sabe por experiencia que los planes de Dios no siempre son los nuestros y que hay que esperar contra toda esperanza, pues las promesas del Dios son realidad. No sabemos cómo, ni cuando Dios nos dará lo que pedimos, pero sabemos, como María, que Dios nos ama y que nos dará cuanto necesitemos. De alabanza: El hombre acostumbrado solo a pedir, aprende de María, que la oración ha de ser ante todo de alabanza. El cristiano ha de ser un hombre que se gloría en Dios. Desde el corazón: La oración cristiana, como la de María, no está formada de muchas palabras sino ante todo de una atención humilde al misterio de Dios que se realiza en el silencio del corazón. En conclusión podemos llamar "oración mariana", a la oración sencilla, basada en la alabanza, que surge del corazón del cristiano, y que se hace perseverante y confiada ante el Dios que todo lo puede, ante el Dios que le ama como a su propio Hijo.

EL VERDADERO ARREPENTIMIENTO

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Tema: Vida cristiana
Subtema: Arrepentimiento
Pregunta: Padre: Me gustaría mucho saber ¿cómo llegar a tener un verdadero arrepentimiento?
Respuesta:
Debemos decir que el Arrepentimiento tiene dos momentos: uno que es claramente de carácter humano y que es una respuesta moral ante un evento determinado, y otro divino que depende de Dios.Me explico: si lo que se cometió va en contra de una norma moral, estaremos hablando de haber pecado. Ante este evento, se da un Arrepentimiento inicial que procede de un juicio entre lo que se cometió y el conocimiento que tenemos de la norma que lo regula así como de la formación que sobre el particular hayamos tenido (que tan malo se nos haya hecho ver esto). Por ejemplo, si desde pequeño se me dijo que el decir una mentira era algo muy malo, y esto se desarrolló como un valor, cada vez que mienta, se creará en mí un sentimiento de remordimiento por haber hecho algo que va en contra de una norma moral aprendida. Sin embargo, este sentimiento no garantiza que la persona pueda evitarlo en el futuro, pues recordemos que el pecado es, como lo dice el apóstol San Pablo (Rm 7), algo que está en nosotros y que es más poderoso que nosotros.
Basados en este texto de Romanos, descubrimos que, el pecado es una fuerza sobre la que no tenemos humanamente control, sobre todo si se trata de nuestras pasiones, ya que de ellas el demonio se aprovecha, por el desorden que vive nuestro corazón, para llevarnos al pecado. Podemos decir que en el momento de pecar el demonio nubla la razón y hace ver el pecado no como algo malo sino bueno. Una vez que hemos pecado, aparece con claridad la realidad destructora del pecado y esto causa en nosotros el estado de conciencia que llamamos "remordimiento" y que en una persona sana y estable dará como resultado el Arrepentimiento. Pero, es algo que ocurre a nivel de la razón y que luego produce de manera pasajera (mientras dura el remordimiento), un sentimiento desagradable. Es por ello que en este nivel de Arrepentimiento continuaremos pecando... sobre todo en lo que se llama “la pasión dominante”, y que produce el pecado habitual.Para salir de ello, es necesaria la acción directa del Espíritu Santo. Sin ella no es posible salir completamente del pecado, ya que su acción en el alma, no sólo consigue el Arrepentimiento, sino lo que se conoce en teológica como el "dolor de los pecados". Cuando esto ocurre, el alma percibe un fuerte dolor interior de tipo espiritual (no intelectual) que le llevará a evitar la situación de pecado a cualquier precio (normalmente viene acompañado de lágrimas). Sería el llevar a la práctica lo que decía Jesús "… mas le vale arrancarse un ojo… o los brazos, con tal de evitar el pecado" (Mt. 5, 29-30).Así pues, el verdadero Arrepentimiento, el dolor de los pecados es una gracia que hay que pedir con insistencia a Dios si verdaderamente queremos ser santos y agradar en todo a Dios.

lunes, 1 de marzo de 2010

AÑO SACERDOTAL

AÑO SACERDOTALDel 19 de junio de 2009 al 19 de junio de 2010
Con motivo de la celebración del 150 aniversario de la muerte del Santo Cura de Ars, San Juan María Vianney, el Papa Benedicto XVI ha decidido que se celebre un especial Año Sacerdotal del 19 de junio de 2009 - fiesta del Sagrado Corazón de Jesús y Jornada para la santificación sacerdotal- al 19 de junio de 2010.
¿Cuál es el objetivo de este año sacerdotal?
Según palabras del propio Benedicto XVI, el objetivo es ayudar a percibir cada vez más la importancia del papel y de la misión del sacerdote en la Iglesia y en la sociedad contemporánea.
¿Por qué se ha elegido la figura de San Juan María Vianney?
Por haber sido un verdadero ejemplo de sacerdote al servicio del rebaño de Cristo.
Benedicto XVI concederá Indulgencias Plenarias por el Año Sacerdotal. ¿Cómo se pueden ganar estas indulgencias plenarias?
1.- Los sacerdotes, arrepentidos de corazón, que recen cualquier día las laúdes o vísperas ante el Santísimo Sacramento expuesto a la adoración pública o en el sagrario y se ofrezcan a la celebración de los sacramentos, sobre todo de la Confesión, se les concederá Indulgencia plenaria aplicable a los hermanos en el sacerdocio difuntos como sufragio, si en conformidad con las disposiciones vigentes se confiesan sacramentalmente, comulgan y rezan por las intenciones del pontífice. También se concede Indulgencia parcial, siempre aplicable a los hermanos en el sacerdocio difuntos, cada vez que recen oraciones debidamente aprobadas para llevar una vida santa y cumplir los oficios que se les han confiado.2.- A los fieles cristianos, arrepentidos de corazón que, en la iglesia o en el oratorio, asistan a la Santa Misa y ofrezcan por los sacerdotes de la Iglesia oraciones a Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote y cualquier obra buena cumplida se les concede Indulgencia plenaria, siempre que se hayan confesado sacramentalmente y recen por las intenciones del Papa los días en que se abre y se clausura el Año sacerdotal, en el día del 150 aniversario de la muerte de San Juan María Vianney, los primeros jueves del mes o cualquier otro día establecido por los Ordinarios de los lugares para la utilidad de los fieles”.Los ancianos, los enfermos y todos aquellos que por motivos legítimos no puedan salir de casa, podrán obtener la Indulgencia plenaria, si con ánimo alejado del pecado y el propósito de cumplir las tres condiciones necesarias apenas les sea posible, “en los días indicados rezan por la santificación de los sacerdotes y ofrecen a Dios por medio de María, Reina de los Apóstoles, sus enfermedades y sufrimientos”.Asimismo se concede la Indulgencia parcial a todos los fieles cada vez que recen cinco Padrenuestros, Ave Marías y Glorias, y otra oración debidamente aprobada “en honor del Sagrado Corazón de Jesús para que los sacerdotes se conserven en pureza y santidad de vida”.¿Quién fue San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars?
Accede a http://webcatolicodejavier.org/SantoCuraDeArs.html para saberlo todo de este gran Santo, cuyo cuerpo se conserva INCORRUPTO.
Oración por los sacerdotesSeñor Jesús, presente en el Santísimo Sacramento,que quisiste perpetuarte entre nosotrospor medio de tus Sacerdotes,haz que sus palabras sean sólo las tuyas,que sus gestos sean los tuyos,que su vida sea fiel reflejo de la tuya.Que ellos sean los hombres que hablen a Dios de los hombresy hablen a los hombres de Dios.Que no tengan miedo al servicio,sirviendo a la Iglesia como Ella quiere ser servida.Que sean hombres, testigos del eterno en nuestro tiempo,caminando por las sendas de la historia con tu mismo pasoy haciendo el bien a todos.Que sean fieles a sus compromisos,celosos de su vocación y de su entrega,claros espejos de la propia identidady que vivan con la alegría del don recibido.Te lo pido por tu Madre Santa María:Ella que estuvo presente en tu vidaestará siempre presente en la vida de tus sacerdotes. Amen

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